Tecwool® T - Protección de Fachada ventilada
Este tipo de solución constructiva se caracteriza por tener una cámara ventilada entre el aislamiento y el revestimiento exterior de la edificación.
El principal fenómeno que ocurre en este tipo de fachadas, es el denominado “efecto chimenea”, éste produce que, durante el verano, el aire del interior de la cámara se caliente y que ascienda por convección, su espacio es ocupado por aire fresco evitando así la acumulación de calor en la fachada.
Por el contario, en invierno no se genera este efecto, pues no se produce un calentamiento suficiente del aire presente en la cámara, si bien en este caso, la fachada ventilada actúa como un acumulador de calor.
Tecwool® T es la solución perfecta para proporcionar un recubrimiento continuo y homogéneo de la totalidad de la fachada, evitando la disminución de la resistencia térmica del cerramiento. Tecwool® T proporciona un sellado eficaz, pues no genera juntas durante su aplicación, evitando puentes térmicos. Tampoco favorece la condensación del vapor de agua presente en el aire de la cámara.
Tecwool® T tiene una clasificación de reacción al fuego A1, cumpliendo sobradamente con el requerimiento impuesto por DB SI (B-s3d2) para materiales que recubren las superficies interiores de las cámaras ventiladas.
Ensayo
Norma :PN-ENV 13361-4
Laboratorio :FIRES
Nº ensayo :FR-057-09
Norma :PN-ENV 13391-4
Laboratorio :ITB
Nº Ensayo :AT 15-8196/2009
Solución
1. Perfiles guía.
2. Cerramiento del edificio.
3. Tecwool® T (espesor en función del aislamiento necesario).
4. Recubrimiento exterior.
Aplicación
Tecwool® T se proyecta mediante máquina neumática conforme a las siguientes especificaciones técnicas:En el caso de aplicar sobre chapa metálica, hormigón, ladrillo, etc., no se necesita ningún tipo de imprimación previa, malla o cualquier otro tipo de soporte que sirva de adherencia al mortero.
La superficie a proteger estará limpia de polvo, aceites, residuos, partículas mal adheridas, restos de pintura, etc.
Es conveniente dar un ligero regado con el agua de la propia manguera de aplicación para así eliminar la suciedad que pudiera tener el paramento. Esto también proporcionará que se alcance un equilibrio térmico entre el mortero y la superficie aplicada.
Hay que pulverizar someramente con agua el mortero una vez proyectado para que el fraguado del cemento se realice en condiciones óptimas.